En primer lugar se procede al desmontaje completo del instrumento, retirada de sus zapatillas antiguas (de serie viene con zapatillas de tripa), y exploración del instrumento para verificar si existen fisuras en el cuerpo, desviaciones de las llaves o los pilares, para un posterior ajuste meticuloso.
Posteriormente se procede a limpieza e hidratación del cuerpo, para mantener las cualidades del ébano intactas al uso con el paso del tiempo.
A su vez, se limpian todas las llaves en baño por ultrasonidos y se pulen los posibles arañazos y roces que pueda tener para recuperar su aspecto brillante como el primer día.
Posteriormente al baño hidratante del cuerpo (5-6 días), se deja otro día más sumergido en viruta de pino para absorber el aceite excedente que no absorbe el cuerpo. 
Para finalizar, se sustituyen los corchos de espiga por unos nuevos, y se montan y ajustan las llaves con sus zapatillas nuevas.
Et voilà: El resultado final.
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